jueves, 3 de febrero de 2011

Algunos alimentos podrían incrementar el riesgo de padecer migrañas en verano

Un mayor consumo en verano de leche fresca por las mañanas, de frutas como la fresa o la naranja en el postre; de atún en conserva y tomate como ingredientes en las ensaladas, de marisco, o de carne no fresca (conservada durante más de 48 horas en el frigorífico), facilitan la ingesta de cantidades altas de histamina, una molécula que aumenta el riesgo de padecer ataques de migraña, según afirman los especialistas de DR Healthcare.


La histamina está presente en todos los alimentos de la dieta cotidiana y el cuerpo la metaboliza a través de la enzima diaminooxidasa (DAO). De hecho, según un estudio realizado por la catedrática en Nutrición y Bromatología de la Universidad de Barcelona Carmen Vidal, el 95 por ciento de los migrañosos estudiados han demostrado tener un déficit de dicha enzima, lo que provoca una acumulación de histamina en el cuerpo que contribuye a desencadenar más ataques de migraña.

En este sentido, los expertos reconocen que es difícil establecer una lista de alimentos intolerables para los pacientes de migraña de forma genérica. Aún así, existen algunos alimentos desencadenantes de migraña por su alto contenido en histamina y que, por tanto, "deberían evitarse por parte de aquellos pacientes cuyo origen de su migraña sea alimentario", tal y como recomienda el laboratorio DR Healthcare.

Es el caso de los alimentos poco frescos, productos vegetales fermentados, el marisco, el pescado azul; algunos cárnicos crudos curados, como el chorizo, el salchichón o la sobrasada; la leche de vaca, mantequillas, los quesos madurados, como el manchego, el gruyère o el roquefort, la clara de huevo o la naranja.

"No todos estos alimentos contienen mucha histamina, sino que algunos de ellos, sin ser histamínicos, provocan la liberación endógena de esta sustancia, pues la histamina también está presente en el interior de nuestras células", explican. Este es el caso, por ejemplo, de la leche de vaca o la naranja.

A este respecto, los especialistas coinciden en que también conviene limitar el consumo de vino, cava o de bebidas destiladas, pues además de contener mucha histamina, el alcohol inhibe la acción de la enzima DAO antes descrita.

Bruxismo, de la boca, nariz y oídos

El bruxismo o bruxomanía es una actividad nocturna y no funcional de los músculos de la masticación. Los músculos de la masticación son muy poderosos y su función consiste en actividades como masticar, hablar o deglutir, sin embargo también intervienen en actividades consideradas no funcionales pudiendo realizarse durante el día como chuparse el dedo, rechinar los dientes, morderse la lengua o cualquier hábito fuera de las acciones funcionales, todas estas actividades tienen en común que suelen realizarse de forma inconsciente. Entre las actividades no funcionales nocturnas la más importante es el bruxismo. Es por tanto un movimiento nocturno, inconsciente, intenso y rítmico de los músculos de la masticación.


El bruxismo es muy frecuente en los niños (bruxismo juvenil) sin que a esas edades se considere patológico sino una forma natural de desarrollo de la dentición y un estimulo del desarrollo muscular y óseo de los huesos de la cara tendiendo a la desaparición al alcanzar la segunda década de la vida, sin embargo en la edad adulta el hábito bruxista puede ocasionar múltiples problemas dependiendo de la frecuencia y la intensidad.

¿Cuáles son las causas?
Aunque los expertos no se ponen de acuerdo existen dos factores fundamentales el estrés emocional y las interferencias oclusales.

El estrés tiene un papel muy importante en el bruxismo de modo que la personas con este habito generalmente soportan altos niveles de estrés y la intensidad del bruxismo depende del nivel de estrés en cada momento.

El segundo factor son las interferencias oclusales es decir alteraciones en los dientes que provocan un mal engranaje de los mismos lo que obliga al organismo a intentar desgastar todas esas interferencias para conseguir una mejoría en la oclusión (la forma de encajar los dientes). Generalmente el desgaste no solo no soluciona el problema sino que lo agrava ya que al irse desgastando los dientes cada vez van encajando peor.

¿Cómo se diagnostica?
Ya que bruxismo es inconsciente y nocturno la única manera de diagnosticarlo es durante el sueño, bien de forma directa mediante la visualización del hábito, o bien midiendo la actividad de los músculos masticadores durante la noche por medio de una electromiografia, estos procedimientos raramente se utilizan para diagnosticar el bruxismo ya que son caros e innecesarios. Puesto que el bruxismo provoca efectos en diferentes partes del sistema masticatorio el diagnostico se realiza de forma indirecta observando el desgaste de los dientes y la tensión de los músculos.

¿Es perjudicial el bruxismo?
El bruxismo se da en casi todos los individuos de forma ocasional sin que ello tenga mayor importancia sin embargo en las personas con bruxismo constante es muy perjudicial para todo el sistema masticatorio: dientes, encías, músculos y articulación temporomandibular ya que las fuerzas que se realizan durante el acto bruxista son enormes comparadas con la masticación normal (hasta 4 veces más).

A nivel de los dientes se produce un desgaste característico que a su vez provoca una perpetuación del bruxismo. A nivel de las encías las debilita de forma que a la larga aparecerá inflamación y movilidad en los dientes. Pero el efecto más perjudicial se da a nivel de los músculos y la articulación temporomandibular en forma de dolores de cabeza, dolores de oído, dolores en el cuello, dolor al abrir la boca , ruidos al abrir la boca y con el tiempo dificultad para masticar, o incluso hablar.

¿Existe tratamiento?
Ya que la causa principal son los factores emocionales el tratamiento consistiría en conseguir reducir al mínimo los niveles de estrés, sin embargo el bruxismo como acto inconsciente es difícil de evitar completamente, por tanto el tratamiento va encaminado a minimizar los efectos perjudiciales mediante la consecución de una oclusión estable y la utilización de férulas de descarga.

Para obtener una oclusión estable es preciso que no falten piezas dentarias y que estas encajen perfectamente por tanto será necesario reponer las piezas que se hayan perdido y que un especialista valore si es posible mejorar la forma de encajar los dientes. Si ya existe mucho desgaste de los dientes es muy importante repararlo para que los dientes tengan la forma adecuada ya que de otro modo será muy difícil conseguir la oclusión adecuada.

Cuando no es posible mejorar la oclusión o de forma preventiva es aconsejable la colocación de una férula de descarga. Una férula es una galleta de plástico hecha a medida para que cubra los dientes de una de las dos arcadas y que como funciones más importantes evita las interferencias oclusales y el desgaste dentario. Las férulas se suelen colocar durante el sueño y además de evitar el desgaste solucionan los otros síntomas derivados del bruxismo: dolores de cabeza, oído, cuello, etc.

En casos muy severos se pueden utilizar medicamentos como el triptizol que alteran las fases del sueño lo que parece evita como efecto colateral el hábito bruxista.